A ESA PUTA LA LLAMAN VIDA

Lunes. 7:00
Suena el despertador. Arriba. Ducha. Desayuno. Metro. Y a clase. ¿Llego tarde?
13:30
En casa. Tareas varias. Comer. Perros. ¿Estudiar?
16:00
Empieza el curro. Mates. Física. Inglés. Lengua. Aprobados. Sonrisas. Palmaditas en la espalda. Suspensos. Palmaditas en la espalda. ¿Voy a cobrar este mes o ya el siguiente?
21:30
En casa. Tareas varias. Cena. ¿Estudiar?

Y por fin a la cama, donde me rodean sus brazo, donde se me escapa alguna que otra lágrima, algún que otro suspiro, y donde, con suerte, en breve estaré dormida.

Pero también hubiese podido ser martes, miércoles, jueves o viernes.

Sábado. 7:00
Suena el despertador. Arriba. Ducha. Al curro.
17:00
En casa. Tareas varias. Estudiar, ahora sí que sí

Pero también podría haber sido domingo, o Navidad, o Reyes, o Año Nuevo, o...

Y ahora viene Wert y me dice que si no tengo un 6.5 como mínimo no debería estar en la universidad.

Ni voy a llorar, ni me voy a cabrear, ni siquiera voy a hacer un leve comentario sobre su persona.
Me voy a limitar a desearle a sus hijos una décima parte de la suerte que yo he tenido en la vida y que me cuente la experiencia.

Pero, como dice uno de los mejores profesores que jamás he tenido, esto es Esparta, my friends, y si quiere un 6.5 lo tendrá, que si él tiene los huevos gordos, nosotros más.

¿Quién se atreve a dudar que sea una auténtica espartana?

Un beso muy grande a todos, que hoy estoy contenta, que por primera vez en mi vida, tengo un cuatrimestre aprobado. GRACIAS a todos los que nunca habéis dejado de confiar en mí.

Carolina.

P.D. La foto tiene ya un tiempo, puede que alguno incluso la recuerde de fotolog, pero es que me encanta 

P.D.2. Esta entrada se la dedico a Fran, que tanto a él como a mí parece que nunca nos han querido poner las cosas fáciles y porque fue la visita capicúa 99. Un besote : )